Evidencias del nuevo nacimiento II
Continuamos con la segunda parte sobre las evidencias del nuevo nacimiento. Tenemos un corazón renovado para Dios Dios renueva nuestro corazón, en lugar de uno insensible a su voz y al toque del Espíritu Santo, pone en nuestro interior uno sensible a Él. Antes no nos dolíamos por el pecado y la desobediencia a los mandamientos de Dios, pero al nacer de nuevo eso cambió, aunque arrastramos la naturaleza caída y tendencias pecaminosas ya no queremos pecar contra nuestro Padre celestial. “Y circuncidará Jehová tu Dios tu corazón, y el corazón de tu descendencia, para que ames a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma, a fin de que vivas” Deuteronomio 30:6 “Y les daré un corazón, y un espíritu nuevo pondré dentro de ellos; y quitaré el corazón de piedra de en medio de su carne, y les daré un corazón de carne” Ezequiel 11:19 “Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra